Whatsappitis
Conoce cuáles son las lesiones generadas por el uso excesivo de los teléfonos móviles
En la actualidad, vivimos en una sociedad en la que las tecnologías conviven entre nosotros en nuestro día a día, de manera que se han vuelto parte de nuestra rutina. Nos despertamos y lo primero que hacemos es mirar el móvil, teletrabajamos desde casa con un ordenador, compramos y hacemos trámites a través de Internet de manera online e incluso tenemos dispositivos que hacen algunas de las tareas del hogar por nosotros. Las innovaciones que han ido apareciendo a lo largo de los años han ido cambiando el mundo de una manera que era inimaginable hasta hace escasos años, haciendo que nuestra calidad de vida aumente a niveles altísimos; pero toda esta situación tiene también sus desventajas. Sin embargo, al tener tan normalizados todos estos avances tecnológicos de los que hablamos, no vemos todos aquellos aspectos negativos que acarrean, como los que se van a exponer más adelante.
Desde su primera aparición en los años 70, los teléfonos móviles han sufrido grandes cambios hasta llegar a tener un papel esencial en la vida de las personas tal como la conocemos. Al principio, estos eran grandes bloques que solo podían ser usados en coches; sin embargo, con el paso de los años, y gracias a las grandes innovaciones tecnológicas, los dispositivos móviles han ido evolucionando hasta llegar a lo que hoy conocemos como smartphones. Tanto su tamaño perfecto, como la facilidad de su uso, han creado la combinación perfecta para que los teléfonos móviles inteligentes se conviertan en un elemento indispensable en la sociedad actual. A día de hoy, y según los últimos estudios realizados en 2021, las personas usan los dispositivos móviles una media diaria de aproximadamente cinco horas. A priori, puede parecer incluso poco, pero eso supone un tercio del tiempo promedio que pasa despierta una persona al día.
Al igual que pasa con muchas otras cosas, y como se dice coloquialmente: todo en exceso es malo. Debemos tener en cuenta que, al usar los dispositivos móviles, estamos haciendo uso a su vez tanto de diferentes huesos como de diversos músculos. Por lo tanto, y según los datos que se han aportado con anterioridad, según la media pasamos aproximadamente cinco horas al día con dichos músculos y huesos en movimiento. Por hacer una comparación y entender mejor la situación ante la que nos encontramos, sería como ir al gimnasio y estar cinco horas ejercitando una parte del cuerpo en concreto. Sin embargo, al tener los dispositivos móviles tan introducidos en nuestra rutina diaria, no nos damos cuenta del tiempo que pasamos delante de su pantalla y todo lo que eso supone. La mayoría de las personas no lo saben, pero existe una variedad de lesiones degenerativas generadas por el uso reiterado de los dispositivos móviles. Estas son llamadas coloquialmente como “whatsappitis”, y se definen como aquellas lesiones causadas por el uso excesivo de los teléfonos móviles; suelen estar situadas en la zona de mano, muñeca y codo. Para hablar sobre ella tenemos a una experta en el campo de la fisioterapia, Ana Arroyo, que nos habla sobre este problema y nos presenta algunas enfermedades en específico.
Dentro del grupo de lesiones del que se ha hablado con anterioridad, estas se diversifican en función de la parte de la articulación que se ve afectada, quedando dividida en tres grupos.
Por un lado tenemos aquellas que afectan directamente a los huesos, que son el dedo en resorte y la rizartrosis. La primera de estas lesiones, el dedo en resorte, supone un bloqueo del hueso al mantener tanto tiempo la articulación doblada; esto es algo que podría pasar, por ejemplo, en los pulgares al estar durante un periodo de tiempo prologando en uso. En la segunda de ellas, la rizartrosis, el roce entre dos huesos por el movimiento constante genera un fuerte dolor y la incapacidad para mover el dedo; una vez más, hablamos de una lesión que se genera en los pulgares.
Por otro lado, nos encontramos con un segundo grupo en el que, en estas enfermedades, los músculos son los afectados; estas son el síndrome del túnel carpiano y la tendinitis de Quervain. Si hablamos del síndrome del túnel carpiano, debemos destacar que los músculos que se ven afectados en este caso son los músculos flexores, es decir, aquellos que nos permiten doblar los dedos de la mano. Esta lesión, generada por el acto de tener el móvil en la mano durante tanto tiempo, produce una sensación desagradable de adormecimiento y hormigueos en los dedos. Si hablamos de la tendinitis de Quervain, que recibe su nombre por el médico que descubrió este tipo de malestar, debemos destacar que los músculos que se ven afectados son los músculos extensores y separadores, es decir, aquellos que nos permiten extender y separar el dedo gordo. Esta lesión se produce por el movimiento de arrastre, término comúnmente conocido como scroll, del pulgar a lo largo de la pantalla; por ejemplo, cuando estás viendo una red social y vas moviendo el dedo para ir deslizando el contenido de la pantalla.
Por último, tenemos una que afecta a un nervio en concreto: lesión del nervio cubital. Esta se genera al estar mucho tiempo tumbado con el móvil en la mano, ya que, debido a la flexión de los codos, el nervio se ve atrapado entre el hueso, los músculos y la piel. Al igual que pasaba con el síndrome del túnel carpiano, se crea esa sensación de hormigueo y adormecimiento de la que se ha hablado con anterioridad; principalmente se genera en el cuarto y quinto dedo.
En conclusión, tenemos tan normalizado el uso continuado a lo largo del día de los dispositivos móviles, que no nos damos cuenta de lo que eso puede suponer. Para evitar las lesiones explicadas con anterioridad, debemos tratar de reducir nuestro tiempo de uso o, al menos, poner periodos de descanso en los que hagamos otras actividades. Así, también dejaremos descansar a otras partes del cuerpo, afectadas por pasar tanto tiempo delante de una pantalla, como la vista.
